Realizan funerales colectivos para las víctimas del terremoto
La ciudad de Gaziantep, cercana al epicentro del sismo, alberga el principal cementerio al que desde el lunes van llegando los cadáveres de las víctimas. El gobierno local requirió a los religiosos musulmanes colaborar con la celebración de los funerales.
Víctimas del sismo que azotó el sureste de Turquía y Siria fueron enterradas este miércoles en el cementerio principal de la ciudad turca de Gaziantep, en un funeral conjunto en el que agruparon los ataúdes de diez en diez, entre allegados desconsolados.
Desde que el lunes el terremoto sacudiera ambos países, las víctimas fatales fueron llegando al cementerio Yesilkent y las autoridades estudian la posibilidad de ampliar los horarios de esa necrópolis. En esa línea, la alcaldesa de la ciudad, Fatma Sahin, hizo un llamamiento para que religiosos musulmanes acudan a Gaziantep a colaborar con la celebración de los funerales.
Cientos de hombres se alinearon este miércoles frente a los ataúdes en el camposanto de Yeslikent, mientras el imán, ayudado de un micrófono, pronunció su oración y bendijo a cada una de las víctimas. Las mujeres se agruparon en otra zona del cementerio, según reporto la agencia de noticias France Press.
Entre las víctimas se encontraban Done y Ayas Sundar, una pareja, y Ayse Colak, de 35 años, que murió junto a su esposo y sus padres en el derrumbe de su edificio en Nurdagi, según contaron sus hermanas.
"Ya no existe Nurdagi, la ciudad está completamente destrozada", dijo una de las hermanas.
También fue enterrada Ruveyda, una adolescente de 17 años que vivía en un apartamento situado en el sexto piso de un edificio. Su madre contó que ambas lograron escapar antes de que el edificio se derrumbara. Pero si bien al principio la joven dijo que estaba bien, a las pocas horas comenzó a sentirse mal y falleció en un hospital, aparentemente por lesiones internas, contó su mamá. Otro de sus hijos, Serhat continúa desaparecido bajo los escombros.
En la región, los rescatistas internacionales y los equipos de socorristas turcos y voluntarios continúan buscando supervivientes. (Télam)